En pañales
1, 2, 3... la que no se ha escondido tiempo ha tenido . No, no voy a escribir sobre mis trucos domésticos para conseguir ahorrar unos euros comprando pañales al por mayor o de cuál es la marca favorita de la casa. Ni siquiera voy a detenerme a explicar cómo está siendo la "operación braguita", en la que aún estamos inmersos (próximamente en este blog). Esta entrada me he permitido la licencia de jugar con el lenguaje para sacar el hacha de guerra y expresar todos los sentimientos, pensamientos y palpitaciones que me surgen al abordar el tema del feminismo, como hija, hermana y madre de un clan en el que el número de féminas supera en mucho al de los hombres.